El otro escándalo de las subvenciones
Rubén Andino La educación subvencionada es un negocio pingüe en Chile para la derecha política y su alter ego, la derecha económica. El sistema entrega al Estado un papel subsidiario en materia de educación y delega la responsabilidad en "sostenedores" (curioso nombre); reservándose la supervisión del buen uso de los recursos delegados en estos “empresarios de la educación”. Los sostenedores (incluyendo algunos ligados a la Concertación) ganan plata con las subvenciones y muchos de ellos además hacen negociados gracias al escaso control ejercido sobre los recursos fiscales que se ponen en sus manos para el noble objetivo de educar. Terminar con el lucro en la enseñanza fue una de las banderas de "pingüinos" (estudiantes secundarios) y profesores, quiénes exigieron terminar el traspaso de recursos públicos a empresarios que otorgan, por regla general, un servicio de mala calidad. Ya sabemos que hubo una negociación y que el gobierno cedió a la derecha fin de lucro. D...